Yo a Messi no lo quiero. Desde 2006 que no lo quiero cuando en la definición por penales, en vez de ir con todo el equipo a dar ánimos, se quedo haciendo pucheros en el banco (ver foto) porque no lo puso el capo de Pekerman. Ahí nomás me di cuenta de que ese pibe era un problema.
Hoy estamos en la cima de ese problema. Llegamos en la peor forma a un mundial, con la interna más desgraciada que me ha tocado ver en la selección y con Messi corriendo 7 km miserables en dos partidos sin goles ni triunfos. Sin jugar a nada.
Si Messi hoy contra Nigeria, a la media hora sigue haciendo NADA en la cancha, si yo soy Paoli, lo saco. Levanto el cartel y lo saco. Y que me vengan a buscar a mi casa si quieren. Pero lo saco y le doy al país entero una lección. Porque hay autoridades que hay que respetar. Y si Paoli lo hace, te juro que cuelgo un poster suyo en mi oficina desde acá hasta que me jubile y le hago la venia todas las mañanas. Te lo juro.
Le deseo suerte a la selección solo porque hay muchos millones de argentinos que en el fulbo tienen su única alegría y me da pena por ellos que les hayan sacado lo único que quedaba puro en argentina. Por ellos les deseo suerte, porque para mí ya me da lo mismo. De verdad me da lo mismo porque a mí, no me representan. No tienen mis valores, no me hacen quedar bien, me obligan a bajar la cabeza dando explicaciones que no tengo sobre lo que están haciendo. Y no estoy hablando de fútbol, lamentablemente. Así que, allá van muchachos, con lo que les quede, y por los que necesitan una alegría. Por mí no se molesten. Yo estoy bien así como estoy.
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